España: La historia macabra del argentino buscado por asesinar a su hijo de 2 años
“Te dejé en el hotel lo que mereces”, fue el mensaje de texto que recibió la madre del menor.
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Hombre buscado por autoridades. (Foto: Cortesía)
Un hombre identificado como Martín Ezequiel Álvarez Giaccio, de nacionalidad argentino, economista y radicado en España, hace más de 20 años. Fue el principal sospechoso de haber asesinado a su hijo de dos años de edad.
Al parecer Alvarez se había separado de su esposa el 16 de agosto. Ambos laboraban en la misma sucursal del banco La Caixa, en el centro de Barcelona.
Vivían felices en compañía de su hijo de dos años, en el barrio barcelonés de Sants. Pero meses después el padre se había separado en buenos términos, eso era lo que detectaban sus vecinos.
Nunca se dieron denuncias sobre discusiones. Ni siquiera había pelea por la custodia del menor de edad.
¿Quién es Martín Ezequiel Álvarez Giaccio?
Es un hombre que toda su vida la construyó en España. Álvarez emigró en la década de los noventas, en la cual estableció su red de contactos y amistades en el país ibérico.
Cuando fue confirmada la ruptura con su ex esposa, abandonó la ciudad de Barcelona y se fue a donde vive su padre, El Vendrell, en Tarragona.
¿Cómo se dieron los hechos?
El día domingo 22 de marzo, Álvarez Giaccio realizó una reserva en el hotel Concordia, de la Avenida Paralelo, en la zona de Montjuic, para pasar únicamente la noche del martes 24. Esa era la fecha en que le tocaba compartir con su hijo.
El pago lo realizó mediante una aplicación de promociones, regalos digitales y descuentos. Ese mismo día paso en la mañana por el menor, en casa de su ex pareja.
De acuerdo con, la periodista de casos policiales Mayka Navarro, en el proceso de la separación no hubo mayores conflictos ni situaciones de violencia.
"Fue por eso que la madre del pequeño permitió que el padre se llevara al chico para pasar la noche en un hotel sin ningún problema", indicó.
El hombre junto a su hijo llegó cerca del mediodía al hotel. Casi toda la tarde pasaron jugando en la piscina del lugar, en donde incluso fueron vistos por otros huéspedes.
“Coincidimos ayer en la piscina con el padre y el niño. El padre le decía ‘Mira a mamá, dile que estás bien, que estás en la piscina’. Lo grabó en el agua y en una silla al lado. Lo único que me pareció curioso es que lo grabó dos veces al pequeño”, afirmó el 25 de agosto una de los huéspedes
Todo el día trasncurría de la normalidad hasta que alrededor de las 10 de la noche, la madre del niño empezó a recibir mensajes un poco intimidantes de Álvarez.
“Te dejé en el hotel lo que mereces”, fue quizás la frase que llevó a la ex esposa de Álvarez Giaccio a dirigirse de inmediato al hotel Concordia.
La mujer corrió con desesperación al sector y pidió acceder a la habitación número 704, donde se encontraba su hijo junto al padre. Pero el pedido fue rechazado por parte del empleado que la atendió en el lobby.
La mujer decidió enseñarle al trabajador los mensjaes y este le ofreció llamar a la policía para que fueran ellos quienes indagaran sobre lo que estaba sucediendo en la habitación.
Una mujer y un hombre que pertenecen a los Mosso d’Esquadra, la policía catalana, ingresaron al cuarto y lograron obserar una de las ventanas abiertas, por lo cual sospecharon que el sujeto había saltado sin el menor de edad.
Pero minutos después encontraron el cuerpo del menor escondido debajo de la cama principal de la habitación. Por más que trataron de reanimarlo el niño no logró sobrevivir.
La autopsia indicó que murió por asfixia mecánica: la hipótesis que surgió con más fuerza es que fue asesinado por su propio padre con una almohada del hotel.
¿Cómo escapó el presunto asesino?
La policía no pudo encontrar a Álvarez Giaccio dentro del Concordia. Sin embargo, las cámaras de seguridad registraron dos secuencias en los que se lo ve al hombre solo. En la primera, se asoma por la puerta de la habitación para constatar si hay otro huésped en el pasillo del piso 7.
El segundo plano lo muestra en un costado de la piscina. Se observa mientras trepa a través de una cerca de una pared lateral y desde allí salta a un balcón de un edificio de la par.
Al parecer, Álvarez Giaccio se escapó por dos balcones de un edificio contiguo al hotel y saltó desde un primer piso directo a la calle.
Un menor que iba con su madre lo observó, e indicó que cayó al suelo y salió corriendo. Minutos después agarró un taxi y le solicitó que lo llevara al aeropuerto de El Prat. Al llegar le pidió al taxista que lo esperara, le pagó con billetes que sacó de un sobre, en el cual había mucho dinero.
Álvarez nunca apareció por lo que el taxista decidió marcharse.
El argentino llegó al primer puesto de control de la Terminal 1 y se topó con una agente de seguridad privada. Le dijo que "no iba a tomar ningún vuelo, pero que debía realizar un trámite administrativo dentro del aeropuerto", un comentario difícil de creer eran casi las 12 de la noche.
La agente rechazó el pedido y le dijo que si no presentaba la documentación exigida por el protocolo de pandemia no podía ingresar al aeropuerto. Álvarez Giaccio dio media vuelta y se fue caminando.
Desde ese entonces, pasó una semana. Sigue sin ser visto, con un pedido internacional de captura sobre su cabeza.
La Justicia apuntará a los delitos de homicidio y de violencia vicaria, un femicidio vinculado, matar a su propio hijo para dañar a su ex pareja.
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